Por José Dolores Berrio Berrio*
Región Cañahuate. El cultivo de marañón silvestre que desde hace décadas abunda en los fértiles terrenos de La Villa de San Benito Abad, y que antes, solo se miraba como un fruto más, de esos que, crecían en abundancia y sin control fitosanitario alguno, cuya fruta era consumida deliciosamente por los niños y mayores de las comunidades, en épocas de cosecha. Se convierte ahora, en una alternativa económica para muchísimas familias que derivan sus ingresos directos y agregados, mediante el cultivo y la recolección de esta fruta tropical, de varios colores, que abunda como pájaros sueltos en los suelos de la histórica Villa de Tacazuan.
La industrialización del marañón en este municipio y gran parte de las regiones San Jorge y Cañahuate, sucreño, está a cargo de la empresa Bendito Marañón que tiene su sede en La Villa de Tacazuan, en la vía que conduce a los corregimientos San Roque Paso de Yegua y La Ventura de Las Bellas Arenas, la cual en estos momentos, se encuentra en proceso de crecimiento organizacional, económico y en infraestructura física, perfilándose, como la gran industria generadora de productos comestibles y medicinales derivados de la deliciosa fruta de Marañón, y de numerosos puestos de trabajo para los profesionales y fruticultores de marañón de este territorio.
Esmeralda González, gerente de Bendito Marañón, resaltó las oportunidades de empleo y oportunidades de bienestar que genera esta empresa desde su creación para las comunidades que de manera natural y comercial se dedican al cultivo de esta tropical frutal.
Invitó a las comunidades a participar de la oferta laboral de esta unidad económica y a los gobiernos de turno apoyar este tipo de iniciativa de economía solidaria y social, ya que ella, se convierte en un músculo económico y financiero que genera bienestar para muchísimas familias, que viven en la pobreza extrema en medio de tantas tierras fértiles.
*Comunicador Social Periodista y Especialista