Desde los tiempos de campaña, el presidente Gustavo Petro propuso una hoja de ruta para alcanzar la ‘paz total’ en Colombia. Lo que inició como un planteamiento de paz, se ha ido convirtiendo en una política de Estado, que hoy establece tres figuras que tendrán la responsabilidad de construir la llamada justicia social.
Se trata de los voceros, gestores y facilitadores de paz, quienes serán los encargados de contribuir para gestionar e implementar los acuerdos que garanticen la viabilidad del proceso humanitario de paz.
Sin duda alguna, estos anuncios han generado ampolla en distintos sectores que cuestionan las funciones de estas figuras ante una sociedad desconfiada y sumamente fracturada, ahora se puede ver con lo sucedido con el exalcalde de Magangué Jorge Luis Alfonso López, liberado abruptamente por un juez de la República que lo vinculó como gestor de paz pero el gobierno solicitó revocar la medida porque solo es un facilitador.
La oficina del Atlo Comisionado para la Paz presentó un ABC de las funciones de cada una de estas figuras que contribuirán a alcanzar la ‘paz total’ que propone el Gobierno Nacional.
Voceros de paz
Los voceros de paz son miembros de organizaciones sociales y/o humanitarias que se encuentran privados de la libertad por delitos menores y que tengan la posibilidad de salir porque fueron capturados en medio de la protesta.
Esta figura tendrá la misión de contribuir a desescalar la conflictividad social en el país, promover la reconciliación entre los colombianos y la convivencia pacífica en el marco de la ‘paz total’
Una comisión multidisciplinaria evalúa casos de personas privadas de la libertad por hechos relacionados con la protesta social, para recomendarlos al presidente, quien es el único con potestad de designar voceros de paz.
Una vez sean designados, los voceros de paz se comprometen, además de la declaración de su lugar de residencia, a comenzar una ruta de acompañamiento que incluye recibir atención psicosocial, rendir informes mensuales ante la Oacp y certificar la realización de un diplomado virtual con la Universidad del Valle en Construcción de Paz y Gestión de Conflictos Sociales y Políticos.
Los voceros de paz podrán trabajar o estudiar si así lo desean. Sin embargo, la designación no suspende o pone fin en ningún caso a los procesos judiciales y tendrán que responder a las autoridades competentes en caso de ser requeridos. La designación no se trata de una amnistía o un indulto. El Estado no asignará salarios a los voceros de paz, ni generará contratos laborales.
Gestores o promotores de paz
Los gestores o promotores de paz son una figura creada por el Gobierno Nacional que va dirigida a miembros de grupos armados. En su caso, se podrá solicitar a las autoridades judiciales competentes la suspensión de la medida de aseguramiento, de pena o solicitar la pena alternativa en contra miembros o exmiembros de grupos armados organizados al margen de la ley.
Es importante tener claro que, la designación de estas personas como gestores de paz no suspende o pone fin, en ningún caso, a los procesos judiciales. Es decir que los gestores tendrán que responder a las autoridades en caso de ser requeridos. La designación no se trata de una amnistía o un indulto; y el único facultado para hacerla es el presidente de la República.
De acuerdo con el ABC del Alto Comisionado para la Paz sobre estas disposiciones indica claramente que el Estado no asignará salarios a los gestores de paz, ni generará contratos laborales.
Facilitadores de paz
El facilitador de paz es una figura de “autorización verificación de voluntad de paz”, en la que el Alto Comisionado para la Paz puede autorizar a una persona para que contribuya a verificar la voluntad real de paz y reinserción a la vida civil, así como la voluntad real de sometimiento a la justicia de los Grupos Armados Organizados (GAO).
Las personas autorizadas como facilitadores adelantarán gestiones siguiendo las orientaciones y en coordinación con el Alto Comisionado para la Paz.
La designación no suspende o pone fin en ningún caso a los procesos judiciales. Es importante tener en cuenta que los facilitadores tendrán que responder a las autoridades competentes en caso de ser requeridos. La designación de esta figura no se trata de una amnistía o un indulto.