El refrán “a río revuelto ganancia de pescadores” parecer tener vigencia en estos días en Magangué cuando la amenaza del Covid-19 tiene a sin número de personas en estado de pánico y en medio de este muchas han decidido protegerse usando tapabocas.
Esta medida ha sido vista por algunos como una gran oportunidad de ganarse unos buenos pesos aprovechándose del miedo de otros para hacer de la venta de estos tapabocas todo un pingüe negocio.
Y es que hasta hace poco menos de un mes en las droguerías de Magangué los tapabocas tenían un precio que oscilaba entre los 300 y 500 pesos, pero ahora ya no los hay y misteriosamente en las calles empiezan a pulular los vendedores ambulantes y estacionarios de tapabocas que cobran mil 500 pesos y 2 mil pesos por cada uno.
Un usuario advirtió sobre esta situación a La Cuarta Vía y este medio fue a las 5 droguerías que se encuentran al frente del Hospital La Divina Misericordia de Magangué y en ninguno de estos establecimientos hay tapabocas.
Pero si por ese sector llueve en el centro de Magangué no escampa pues visitamos 7 droguería y en ninguna lo pudimos encontrar.
El usuario señaló que lo que se podría estar presentando es un acaparamiento por parte de mayorista que compraron toda la existencia de tapabocas en Magangué a “precio de huevo” y ahora están llenando sus alforjas con dinero “cantante y sonante” ante la mirada permisiva de las autoridades que no han ejercido control sobre esta situación.