Aunque la mesa directiva del Congreso de la República había solicitado una modificación en el decreto de aislamiento, que le permitiera a los legisladores reunirse de manera presencial en la sede del Capitolio, el Gobierno nacional no accedió a esa petición.
En respuesta a la carta que fue enviada por el presidente del Senado, Lidio García, la ministra del Interior, Alicia Arango, aseguró que no podrá reformarse la norma que prohíbe reuniones de más de 50 personas en recintos cerrados, “toda vez que dichas medidas son de obligatorio cumplimiento”.
“Estas medidas aplican para todos los habitantes del territorio nacional sin excepción ni distingo alguno, ya que propenden por garantizar la vida y la integridad personal”, indica la misiva de la ministra del Interior.
El Gobierno recuerda que, si bien existe la obligación de cumplir el aislamiento preventivo decretado por el presidente de la República, se consagraron unas excepciones que permiten la movilidad y el trabajo de algunos funcionarios durante la emergencia sanitaria.
“Es este el caso de los miembros del Congreso de la República a quienes, en su calidad de integrantes de un órgano de naturaleza constitucional y autónomo, les fueron reconocidas plenas garantías para el ejercicio de sus funciones”, indica.
La respuesta del Gobierno también le hace una invitación al Congreso para que, utilizando todos los elementos de bioseguridad, se pueda diseñar una estrategia que les permita sesionar de forma presencial.
“Entendiendo la importancia del funcionamiento de la corporación que usted preside, le proponemos avanzar de manera coordinada en un protocolo de bioseguridad, con el aval del Ministerio de Salud, para buscar la posibilidad de realizar sesiones presenciales en las instalaciones del Congreso de la República”, finaliza la ministra Alicia Arango.