Según la Gran Encuesta Integrada de Hogares, GEIH, del DANE, en Colombia durante el año 2022 se ocuparon 649 mil personas en la posición de empleados de servicio doméstico de los cuales solo el 20,4 % afirman haber recibido prima de servicios, mientras que el 79,6% no la ha recibido.
Durante el mismo año, la mayor parte de los ocupados empleados domésticos eran mujeres con un 93,1 %, es decir 604 mil mujeres ocupadas. Se recuperaron 146 mil empleos de mujeres en esta posición ocupacional respecto a 2021 y en hombres 20 mil ocupados más.
Con estas cifras la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, señaló que se hace necesario que el proyecto de ley de la reforma laboral sea aprobado por el Congreso de la República pues en este se incluye un renglón muy importante que da toda la dimensión de plenos derechos a las trabajadoras y trabajadores del servicio doméstico.
“La reforma lo hace realidad y esperemos que efectivamente así sea aprobada en el Congreso de la República, porque a través de ella vamos a lograr el proceso de formalización de más de 600 mil trabajadoras que están en este país”, dijo la ministra.
La presidenta de la Unión de Trabajadoras Afrocolombianas del Servicio Doméstico, Utrasd, Claribel Palacios, dijo que con esta reforma laboral las trabajadoras domésticas pueden empezar a soñar con tener las garantías de sus incapacidades, de sus permisos laborales, tener su seguridad social, sus prestaciones de ley y trato digno y decente, que es una de las situaciones más críticas en el sector.
“No hay trabajo digno y decente, porque no están equiparadas las prestaciones, la seguridad social y el trato a la trabajadora doméstica, pero, además, hay una gravedad, y es que no se reconoce el trabajo doméstico como trabajo y tiene la misma categoría que otros tipos. Realmente el convenio 189 lo tiene incorporado, no somos ayuda, ni somos favor, somos trabajo doméstico”, concluyó Palacios García.
