Por: Carlos Paba García
El siguiente escrito podría muy bien llamarse los diez mandamientos contra el coronavirus, toda vez que deberían convertirse en estatutos en medio de la situación que vive el país. Sin embargo, es mejor denominarlo UN LLAMADO URGENTE A… porque más que ordenar y a obligar, invita a dar, a entregar, a cuidar y por su puesto a sacar lo mejor que hay dentro del ser. A continuación los diez llamados:
Un llamado urgente a los políticos corruptos para que no roben en medio de la cuarentena y menos después de toda la crisis que se genere de la pandemia producida por el Covid -19.
Un llamado urgente a los pastores, sacerdotes y líderes religiosos para que pidan menos plata y pidan más a Dios y sobre todo que se contextualicen en medio de la situación, dando la palabra de Dios, la cual es la única que da real esperanza en medio de todos los tiempos.
Un llamado urgente a los bancos para que detengan por los meses necesarios las cuotas e intereses de las deudas.
Un llamado urgente a los entes que se encargan de administrar los servicios públicos para que detengan o pospongan el pago de los mismos. Un llamado urgente a los entes de control para que realmente se vigile y se sancione a los especuladores de precios de los alimentos, drogas y demás aspectos básicos en esta época.
Un llamado urgente a los empresarios, terratenientes y ricos de este país para que piensen menos en su dinero y ayuden a la sociedad especialmente a la más vulnerable, tal vez para esto Dios les permitió alcanzar sus riquezas, para ayudar en medio de la pobreza.
Un llamado urgente a los estratos medios, que reciben sueldo sin estar trabajando o tienen sus ahorros, de acordarse de un prójimo (próximo) que no tiene esa posibilidad y que vive del rebusque. No se necesita cruzar el océano, ni el mundo para ayudar a otros, algún vecino o persona en tu barrio o ciudad necesita de tu humilde ayuda.
Un llamado urgente a las personas con necesidades económicas para que no pierdan el control y aumenten la desolación, la ansiedad, el desorden y el terror en las calles.
Un llamado urgente a los dueños de almacenes, depósitos y tiendas para que se mantengan los precios y no agraven la situación del país.
Un llamado urgente a la sociedad en general para que siga las recomendaciones dadas por las autoridades, es una de las mejores maneras de sumar y no restar en medio de la situación.
n llamado urgente a todas las familias para que vuelvan a leer la Biblia, a practicar lo que dice la Biblia, a creer en lo que dice la Biblia y a hablar lo que dice la Biblia. Ella es la lámpara que alumbra el camino para que lo pies no tropiecen. Ella es la lumbrera que no dejará que las tinieblas prevalezcan en la mente, en el alma y en la sociedad.
¿Cuál de los anteriores llamados aceptaras? El país te necesita, la región te necesita, la ciudad te necesita, tu prójimo te necesita.
