El mecanismo de los ‘gota a gota’, o ‘presta diario’ o ‘prestamos express’, es sencillo: se presta de inmediato y sin garantías a una tasa de interés que excede ampliamente la usura (entre 20 y 30 % mensual, en algunos casos), y se cobra violentamente si el beneficiario no cumple los plazos pactados.
Estas redes funcionan acorde a diversas fórmulas: algunas reparten tarjetas de presentación o volantes en tiendas, locales, plazas de mercado, o se invita a “amigos” que solucionan un problema económico con un crédito. Esta modalidad se ha extendido a todo el país y ya se abrió paso en el continente americano.
No ha habido estrategia alguna para detener este fenómeno, ni el gobierno ni el sistema financiero han podido acertar con algún mecanismo para que la gente no tenga que acceder a estos préstamos, porque uno de esos problemas es que el dinero de esta gente llega hasta la puerta de la casa sin tramite alguno.
Pero el modelo ha ido evolucionando y hoy no solo están algunas personas que ponen un poco capital entre unos cuantos vecinos fiables y cobran los mismos intereses, pero con recursos limitados; hoy el modelo se ha multiplicado y existen grandes organizaciones donde reparten millones en una región, adquieren una oficina o casa, compran las motos a utilizar en el negocio y contratan a jóvenes para cobrar el diario, y a otros para hacerse cargo de los “deudores pesados”.
Y es precisamente lo que esta pasando en toda la región de Magangué y municipios vecinos de los departamentos de Sucre, Magdalena y hasta Córdoba.
Están trabajando en lo que se llaman “oficinas”, una organización con todo listo y operando por región, desde Magangué se mueven unos, otros en Sincelejo y ya llegaron también a Mompox.
Algunas de estas oficinas son señaladas acorde al lugar de procedencia, así están “los paisas”, los “caleños”, los “guajiros”, y nos cuentan que hay varias de estas organizaciones trabajando en el municipio.
Para algunos conocedores presumen que estos prestamistas han llegado a uno de cada tres negocios de economía informal en Magangué, pero que también ya accedieron al préstamo familiar, por lo que también se extendió progresivamente a la zona rural del municipio y la región.
Consultados vendedores que acceden a los prestamos nos cuentan que no ven otra forma para abrir o acceder a recursos que necesitan de momento, igualmente sin tener un censo hablan de que el fenómeno se ha extendido y que, en el caso de comerciantes, por ejemplo, el mercado Baracoa de Magangué, “casi todos tienen prestamos”, nos comentan.
En Magangué no hay un estudio concreto de la masificación del fenómeno ni tampoco se ha tratado abiertamente, pero las denuncias de la llegada cada vez más de estas organizaciones son constantes.
Tampoco hay un estimativo de los recursos que ha inundado el mercado del municipio, pero se dice extraoficialmente y de forma sigilosa que para el caso de una de estas organizaciones es fácil saber que por lo menos tendría 500 millones prestados de esta forma y solo para una ruta, así se llama la vía por donde se ha extendido el préstamo y así el cobro también.
La ruta la determina la capacidad de poner en las manos de las personas los recursos a necesitar, igualmente supimos que hay diferentes formas de trabajo de estas organizaciones, algunas con modelo flexible, pero ninguna con disentimiento de la deuda.
El presta diario es uno de los fenómenos sociales con mayor presencia en la economía informal de la región, una solución para muchas personas que presenta serias implicaciones en la economía municipal y regional, algo que hoy no está medido pero que ese sabe que existe y cada día tomando una mayor dimensión en nuestra región.