Cada año, una docena de asteroides pasan a unas casi cinco millones de millas de distancia de la Tierra y, potencialmente, podrían impactarla. En consecuencia, la NASA prepara un plan para prevenir este potencial accidente, que consta del lanzamiento de una nave espacial, cuyo objetivo es chocar contra uno de los peligrosos bólidos para desviarlo cuando aún se encuentre muy lejano al planeta.
Se trata del Proyecto DART, una expresión cuya sigla significa Double Asteroid Redirection en inglés o prueba de redirección de doble asteroide en español. La misión está programada para lanzarse en julio de 2021.
“Se estrellará una nave en el asteroide más pequeño de un sistema binario. Será fácil medir cualquier cambio en la órbita del objeto más pequeño desde la Tierra y será un buen indicador de si lo han desviado con éxito”, se explica en un artículo de la revista National Geographic.
“Se trata de un momento emocionante. Creo que DART será una demostración extraordinaria”, afirmó Ed Lu, un astronauta jubilado de la NASA y fundador de la B612 Foundation, una organización sin fines de lucro dedicada a la detección y el desvío de asteroides.
La nave espacial se acercará a un asteroide de unos 2,600 pies de ancho llamado Didymos, en octubre de 2022, a una distancia de unas 7.2 millones de millas de la Tierra.
El plan de la agencia espacial tiene, como primer objetivo, identificar al asteroide “asesino”, un paso fundamental según explican los especialistas. Una tarea nada sencilla pues, según la NASA, en la actualidad hay 2,078 planetoides potencialmente peligrosos en el catálogo.
